Es un común acuerdo que la estructura de un buen diseño curricular descansa,entre
otros factores, en la integración de los aportes que realiza el especialista en currículo y los
contenidos sugeridos por los especialistas de contenido.
Luego est sujeta revisión la afirmación de que
"Para educar sobre las TIC es siempre mejor un profesor de tecnología que un profesor de filosofía o sociología",
muy por el contrario esta afirmación es contraria a la concepción del proceso educativo
desde una visión integradora .
Dorrego (2007) interpreta que las entre las decisiones a considerar para la incorporación de las TIC a la enseñanza hay dos de carácter prioritario: “las referidas a la capacitación, y a la estructura y el equipamiento.”(Dorrego, 2008, pág. 126). El éxito de la utilización de las TIC depende no solo de disponer de la infraestructura necesaria, se requiere de la capacitación de profesores y alumnos, estos últimos “deben ser capaces de utilizar las TIC para sus aprendizajes y para producir material con ese mismo fin” (Dorrego 2008).
Tal vez las TIC aporten flexibilidad al proceso educativo, al punto de que podamos migrar a propuestas de educación a distancia, pero, por nuestra naturaleza gregaria, pareciera difícil afirmar que " en el futuro la educación no se hará en escuelas presenciales".
El binomio escuela-casa seguirá llamado a ser el espacio primario de encuentro
humano, de sensibilización y de formacion en valores.
Referencias:
Dorrego, E. (2007) Transformación de la educación superior en América Latina.
Nuevas Tecnologías y Educación, Prentice Hall, Madrid.
